Después de más de seis meses, el pasado viernes salimos con la caravana.
Hubiésemos salido antes, pero las niñas y el frio son una mala combinación. Así que cuando vimos que en el puente de Pascua las temperaturas serían altas.. nos decidimos a quitarle el polvo a la caravana y preparar el viaje.
Lo primero que hice fue cambiar las 4 ruedas de la caravana.. ¿Creéis que solo tiene dos? No.. hay que contar la de repuesto, y en mi caso la rueda Jockey (la del enganche).
Después del pinchazo de este verano no quería más sustos, así que cambie lás tres ruedas y sustituí la neumática por una rueda rígida ya que se había deshinchado y con la presión la cámara habría reventado.
Dicen que con las ruedas Jockey neumáticas la caravana se maniobra mejor, sobre todo en terrenos con grava (la mayoría de los campings), pero tienen el inconveniente de necesitar presión cada dos por tres y de sufrir algún que otro pinchazo. Las rígidas son mas fiables y en este viaje la experiencia no ha sido mala. Supongo que en un futuro llevaré las dos.
El destino escogido para la escapada fue Moraira, en el norte de Alicante. Un pueblo de costa precioso, rodeado de pequeños montes repletos de casitas. Está a pocos kilómetros de Calpe y es uno de los sitios preferidos de los extranjeros, ingleses en su mayoría.
La de la foto es la única playa y como es lógico se pone a parir de gente. El sábado, con 26 grados y un sol radiante no cabía un alma.
El camping esta justo en medio de toda esa vegetación que se ve en la foto (sombra no le falta).
Una vista desde el puerto deportivo.. la playa y el peñón de Ifach al fondo..
Pero vamos a lo que nos ocupa.. el camping.
El Camping Moraira es pequeño. Apenas 6o parcelas estrechas con un solo bloque de aseos, un restaurante y una piscina que lógicamente estaba vacía.
Las calles son estrechas y las parcelas muy justas y situadas en terrazas. No todas son aptas para una caravana con su correspondiente avance, sobre todo por la dificultad de maniobrar. Solo había caravanas en las dos primeras calles y en la ultima.
Abundaban las autocaravanas y las tiendas de campaña. A pesar de ser Pascua, el aforo del camping no llegaba al 30% lo que indica que es un camping típicamente veraniego.
A pesar de que los pronósticos daban buen clima para el fin de semana (26º-15º) decidimos montar el avancé ya que llevaba casi un año plegado. Como es lógico ya no nos acordábamos de como se montaba y nos llevó más de una hora.
La rutina siempre la misma.. colocar la caravana, conectar la luz, bajar las patas, sacar las mesas y las sillas, extender el avancé y montarlo, y luego colocar el suelo. Pocas cosas dan tanta satisfacción como preparar tu casa con ruedas.. y pocas cosas joden mas que recogerla..
Situamos la caravana justo detrás de otra similar pero más pequeña, una Moncayo 330 costa Azul que tenia un toldo de decathlon por avancé (tomamos nota).
Unas horas más tarde llegaron sus dueños, una simpática pareja de Sagunto con dos niños pequeños que rápidamente se hicieron amigos de nuestras mellizas. Más tarde, y como suele ser habitual se unieron todos los niños de los bungalows cercanos. Casi nos podíamos olvidar de las niñas.
La pareja vecina, Carolina y Francisco, nos invitó esa misma noche a tomar algo en su “porche” y nos pasamos hablando un buen rato. Eso es lo mejor que tiene el camping, que conoces gente y más si vas con niños pequeños. Francisco me comentó como se había instalado el mismo la conexión eléctrica, la cocina y la nevera. Y yo que pensaba que le había hecho cosas a mi caravana..
Al día siguiente visitamos el rastro de Xaló, pueblo situado pocos kilómetros al interior y famoso por su vino dulce (Mistela). Es un rastro al aire libre fundamentalmente de antigüedades que se instala cada sábado en las afueras del pueblo.
Compramos fruta y me hice con una gorra para aguantar los mas de 30 grados del mediodía. Después, comida en un sitio cercano y vuelta al Camping a descansar.
Por la tarde el sol se escondió y apareció el viento. Después de una vuelta rápida por Moraira para comprar carne para la barbacoa, volvimos al camping y decidimos que la cena seria en nuestro avancé, a salvo del viento.
Después de zamparnos salchichas, chorizos y costillas, y de un par de botellas de vino vinieron los pastelitos y la Mistela. Que dura es la vida del campista.
Francisco y yo hablamos de las pedazo de autocaravanas que tenian los giris (que rondaban los 60.000 boniatos) , y le comenté que se me había pasado por la cabeza hacerme con un 4×4 con algunos años como su Opel Frontera.
La idea de remolcar con más alegría me ronda por la cabeza desde el viaje del verano pasado. Aun recuerdo a la Picasso subiendo a Zaragoza cuesta arriba apenas pasando de 60..
Charlando charlando llegó ya al domingo. Las vacaciones pasaban volando. Buen clima, naturaleza y buena compañía.. ¿que mas se puede pedir?
Al día siguiente dimos una vuelta por el camping.. los bungalows estaban llenos, mucho por chavales con la música a tope..
Francisco Jose Perrz
hola jose.
no hay parte 2.
un saludo
admin
Aquí la tienes Francisco !!! https://www.blogcamping.com/la-primera-salida-del-ano-parte-2/